Por David R. Lorenzo
Al celebrarse en la República Dominicana este viernes 5 de abril del 2019 el Día Nacional del Periodista, esta carrera se ejerce en medios de avances y retrocesos, que producen estos últimos, un panorama un tanto desalentador.
Otro logro importante para el periodismo fue la inclusión en la Constitución Dominicana del 26 de enero del 2010, las cláusulas de conciencia y el secreto profesional, que le da al periodista garantías para ejercer la profesión con seguridad y determinadas libertades.
Igualmente, se puede resaltar el aumento de las escuelas de comunicación de las universidades dominicanas, que permite que más personas puedan estudiar la profesión.
También, la pensión por parte del Estado de más de 200 periodistas gestionadas por el Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), institución que realiza también un adecuado programa de educación y recreación.
Otro logro importante para el periodismo fue la inclusión en la Constitución Dominicana del 26 de enero del 2010, las cláusulas de conciencia y el secreto profesional, que le da al periodista garantías para ejercer la profesión con seguridad y determinadas libertades.
Igualmente, se puede resaltar el aumento de las escuelas de comunicación de las universidades dominicanas, que permite que más personas puedan estudiar la profesión.
También, la pensión por parte del Estado de más de 200 periodistas gestionadas por el Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), institución que realiza también un adecuado programa de educación y recreación.
Igualmente, durante los últimos 5 años han surgido decenas de periódicos digitales, lo que contribuye a la democratización de la información y a ser una fuente de empleos.
Entre las sombras se encuentran la vulnerabilidad del ejercicio profesional, la falta de creación de un verdadero Colegio de Periodistas, los bajos salarios, la inestabilidad laboral, la desaparición de varios medios de comunicación y la falta de rentabilidad de otros.
El incumplimiento de las layes laborales, como la jornada de 8 horas de trabajo, el pago de horas extras y la libertad sindical, entre otras son partes de los problemas que padecemos los periodistas.
El auge del periodismo político pagado o comprometido con diversos sectores, incluyendo los vinculados a las mafias, al bajo mundo y la corrupción, es un cáncer que crece cada día.
La práctica de ejercer la dictadura sindical, la carroña y EL surgimiento de estafadores con los llamados astrólogos y numerólogos, provocan que los medios electrónicos de comunicación se estén convirtiendo en una especie de cocaína virtual, que enferma la sociedad dominicana.La práctica de ejercer la dictadura sindical, la carroña y a veces las inconductas en las organizaciones sindicales de la República Dominicana, que destruyen sus estructuras y sus principios y los convierten en cáscaras inservibles, con el apoyo de seguidores fanatizados y ausentes de corduras, es otro mal que ha echado raíces en nuestro país.
En cuanto a la profesión del periodista, esta es la más vulnerable de todas las profesiones de la República Dominicana, con la agravante, de que nuestro CDP, lo hemos convertido en un cadáver, que para poder resucitarlo, necesariamente se necesitará de una nueva Ley, que desafortunadamente, la mayoría de sus dirigentes, ni los viejos ni los jóvenes, ni la entienden ni la defienden, como ocurría en décadas pasadas.
Ojalá que el porvenir sea más venturoso, donde el periodista pueda ejercer con plena libertad y seguridad; que las empresas periodísticas se fortalezcan y expandan, que tengamos mejores condiciones laborales y sobre todo, podamos lograr tener un verdadero Colegio de Periodistas.
Post data: El autor es candidato a la presidencia del CDP. Fue secretario general del SNTP y presidente del IPPP. Actualmente es el director ejecutivo del CDP.